Las mezclas asfálticas en caliente se pueden diferenciar por su granulometría, la cual puede ser densa, abierta o de tipo SMA. En este artículo te explicamos las principales características de las mezclas asfálticas densas.
Las mezclas densas son mezclas de alta resistencia y utilizan agregados asequibles triturados. Se caracteriza por ser una mezcla uniforme y homogénea, elaborada con ligante asfáltico y materiales pétreos bien graduados. La baja impermeabilidad al agua mejora en gran medida las características de resistencia a la intemperie.
Al diseñar una mezcla densa, se deben examinar y evaluar una serie de factores para garantizar que se colocará una superficie adecuada que funcionará durante su vida útil.
Los siguientes factores pueden tener un efecto tremendo en el desempeño de una mezcla graduada densa; forma del agregado, trabajabilidad de la mezcla, tipo de agregado, capacidad de recubrimiento y contenido de asfalto residual.
Si se abordan estos factores, las posibilidades de colocar una buena mezcla densa aumentan considerablemente.
Forma y tipo agregado:
La forma general de la mezcla puede influir en la cantidad de agregado, así como en la cantidad de emulsión asfáltica que se utilizará. Cuanto más graduado sea el agregado, mayor será la cantidad de emulsión necesaria. La compatibilidad de la emulsión utilizada con el agregado es crítica.
Trabajabilidad de la mezcla:
La emulsión utilizada debe dar a la mezcla terminada la capacidad de trabajo suficiente para colocarla de manera uniforme y homogénea y debe estar diseñada para el método de procesamiento previsto, ya sea una colocación inmediata o en una pila para después.
Capacidad de recubrimiento:
La emulsión asfáltica debe tener la capacidad de recubrir el agregado fino (debe pasar 4,75 mm) sin que se formen bolas. Con algunas emulsiones, mezclar agua puede ayudar a recubrir los agregados.
Asfalto Residual en la Emulsión:
La cantidad de asfalto residual en la emulsión puede afectar la cantidad de emulsión necesaria para recubrir el agregado. Cuanto menor sea el residual, mayor será la cantidad de emulsión asfáltica necesaria.
Durante el proceso de diseño, los dos factores clave que se necesitan son una mezcla bien recubierta combinada con una resistencia y estabilidad adecuadas que puedan manejar la carga y el volumen del tráfico.
Si se tienen en cuenta estos factores al diseñar la mezcla densa, las posibilidades de una mezcla exitosa aumentan considerablemente. Por lo general, una mezcla graduada densa requeriría un contenido de emulsión de 5,5 a 7,0%, una estabilidad mínima de 2500 Newton a 25°C y vacíos de aire de 7 a 11%.
En VISE contamos con un laboratorio altamente equipado en el que analizamos tanto los agregados como las mezclas asfálticas que tenemos disponibles, pues nuestro objetivo es asegurar la excelencia y calidad de cada producto, otorgando el sello de calidad que nos ha distinguido por 57 años.
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